Día Mundial de la Tierra 2016

Desde DAGU hemos pensado recomendarte pequeños gestos que puedes hacer tú desde casa para colaborar con la sostenibilidad del medio ambiente y de los recursos alimentarios del planeta:

  • Planifica tus comidas y prepara una lista de la compra con lo que realmente vas a consumir en los próximos días.
  • Aprovecha todo lo que hay en la nevera y también las sobras. Da rienda suelta a tu creatividad e invéntate recetas a partir de “lo que hay”. Para esto el huevo puede ser un gran aliado 😉
  • Acostúmbrate a congelar los alimentos frescos y las sobras que no vayas a comer enseguida, así evitarás que se estropeen y las tendrás a punto para cuando las necesites.
  • No deseches piezas de fruta u hortalizas sólo porque parezcan “feas”. Si sólo consumimos las piezas “bonitas” provocamos la destrucción de grandes cantidades de alimentos utilizables que tras consumir agua y espacio de cultivo acaba siendo desechada.
  • Aprende a comprender bien el etiquetado de los productos. A menudo la fecha de consumo preferente es distinta de la fecha de caducidad. Evita tirar comida que todavía se puede consumir o congelar.
  • Congela y prepara la comida en raciones que realmente vas a consumir.
  • Utiliza el sistema FIFO para organizar tu cocina como las grandes empresas organizan sus almacenes: “First In, First Out”. Es decir, consume primero lo que compraste antes (o lo que va a caducar primero).
  • Finalmente, cierra el ciclo de los alimentos aprovechando los restos como abono si tienes jardín, o separándolos en el contenedor público de material orgánico donde se podrán convertir en compost.

Día Mundial de la Tierra 2015

Desde DAGU hemos pensado recomendarte pequeños gestos que puedes hacer tú desde casa para colaborar con la sostenibilidad del medio ambiente y de los recursos alimentarios del planeta:

  • Planifica tus comidas y prepara una lista de la compra con lo que realmente vas a consumir en los próximos días.
  • Aprovecha todo lo que hay en la nevera y también las sobras. Da rienda suelta a tu creatividad e invéntate recetas a partir de “lo que hay”. Para esto el huevo puede ser un gran aliado 😉
  • Acostúmbrate a congelar los alimentos frescos y las sobras que no vayas a comer enseguida, así evitarás que se estropeen y las tendrás a punto para cuando las necesites.
  • No deseches piezas de fruta u hortalizas sólo porque parezcan “feas”. Si sólo consumimos las piezas “bonitas” provocamos la destrucción de grandes cantidades de alimentos utilizables que tras consumir agua y espacio de cultivo acaba siendo desechada.
  • Aprende a comprender bien el etiquetado de los productos. A menudo la fecha de consumo preferente es distinta de la fecha de caducidad. Evita tirar comida que todavía se puede consumir o congelar.
  • Congela y prepara la comida en raciones que realmente vas a consumir.
  • Utiliza el sistema FIFO para organizar tu cocina como las grandes empresas organizan sus almacenes: “First In, First Out”. Es decir, consume primero lo que compraste antes (o lo que va a caducar primero).
  • Finalmente, cierra el ciclo de los alimentos aprovechando los restos como abono si tienes jardín, o separándolos en el contenedor público de material orgánico donde se podrán convertir en compost.